Cuando estamos sometidos a mucho estrés, puede ocurrir que el acto de comer se convierta en una rutina, que ni siquiera seamos conscientes de qué estamos comiendo realmente. Pero en Can Fusté nos esforzamos por poner en la mesa el mejor producto de temporada, y queremos que lo disfrutes como se merece.
Como ya comentábamos hace un tiempo en nuestro blog, hay estudios que demuestran que el estado de ánimo permite que disfrutemos más de la comida. Es un factor que influye en nuestro paladar y que puede controlarse.
Queremos que disfrutes realmente de cada bocado, por eso te traemos unos consejos para que goces de todos y cada uno de los platos que te ofrecemos en el restaurante.
Cómo disfrutar más de la experiencia en Can Fusté
Un primer paso importante es dedicar unos minutos a relajarse al llegar al restaurante. Una manera sencilla es controlar la respiración cuando ya estás sentado en la mesa. Mientras haces la comanda y esperas los entrantes, tienes tiempo para desconectar un poco de las tareas que traías en la mente y empezar a concentrarte en lo que vas a hacer ahora: disfrutar de la comida.
Siempre que sea posible, comparte la comida con amigos, familiares y/o clientes. Pasar tiempo alrededor de la mesa es una buena forma de desconectar de los quehaceres diarios y estrechar lazos.
Y, en último lugar pero no menos importante, desconecta el móvil. Estar atendiendo llamadas o mirando mensajes durante la comida es totalmente inadecuado si estás acompañado. Pero aunque estés comiendo solo, el móvil te impide concentrarte en los sabores y las sensaciones que te aportan los platos.
Come con los cinco sentidos
Con estos consejos estamos seguros de que la hora de la comida no solo se convertirá en una interrupción real de tus tareas. También cambiará por completo (a mejor) y disfrutarás más de tu forma de ver la comida en general, y nuestra cocina en particular.